"Guerreros del Teclado" se hace eco de la Plataforma Ciudadana, Democracia Real Ya.

Hola Amig@s y lectores blogueros.
Permitirme que os trasmita este interesante artículo y de paso hago difusión de la
Plataforma Ciudadana Democracia Real Ya, en la cual intento colaborar humildemente con mi pequeño granito de arena por medio de mi blog, La Zona Mileurista. De paso agradecer a tod@s las personas, especialmente a l@s que están currando de lo lindo desinteresadamente, para que este proyecto que demanda cambios en beneficio de toda la sociedad salga adelante.


La calle (y la red) es nuestra.
Lali Sandiumenge

¿Apáticos? ¿Desafectados? ¿Pasivos? En absoluto. No es eso ni mucho menos lo que bulle en la red ni lo que destilan los miembros de la plataforma ciudadana Democracia Real Ya, una de las varias que han surgido en el ciberespacio español para decir que ya basta y promover un cambio. Curiosa desde que la descubrí en el muro de una amiga en Facebook, me pasé ayer por la reunión semanal que la sección de Barcelona mantiene en el barrio del Raval y lo que percibí fueron grandes dosis de entusiasmo para combatir la indignación. Cada domingo suelen coincidir aquí entre 30 y 40 personas; es cuando el mundo online y el offline se conectan y se asocian caras desconocidas con cuentas en las redes sociales y mensajes dejados en los fórums. Sobre la mesa, tenían los carteles y las pegatinas con los que anunciarán en la calle lo que llevan tramando desde hace tres meses en internet: una manifestación ciudadana el 15 de mayo, convocada en treinta ciudades españolas bajo el lema “No somos mercancía en manos de políticos y banqueros”.

La historia esta vez se escribe un poco en sentido contrario. Aunque la idea de hacer algo se inspiró en Islandia, la de llamar a la movilización a través de las redes sociales lo hizo en gran parte en las revueltas de Túnez y Egipto. Todo empezó a principios de febrero, cuando unos cuantos amigos decidieron que hacía falta unir con estruendo todas las voces críticas contra la crisis y la manera de gestionarla. “Había distintos grupos y blogs, pero el activismo estaba disgregado, y decidimos crear un grupo de coordinación para que se convirtiera en una forma de acción conjunta”, explica desde Madrid Fabio Gándara, un abogado de 26 años que está en el paro y opositando, miembro de Juventud en Acción. “La situación no es equiparable con el mundo árabe, pero pensamos que teníamos que aprovechar el nivel tecnológico que hay en España para algo más constructivo que el mero entretenimiento”. “Los árabes nos han enseñado mucho, ahora ellos son pioneros en democracia”, añade Javier Toret, un malagueño muy activo en Barcelona y miembro de La-Ex, que cede su local en la calle Sant Pau a la plataforma catalana.

Algo parecido sucedió con la iniciativa portuguesa Geraçao à Rasca (Generación precaria), convertida en el Movimiento del 12 de Marzo porque ese día reunió a centenares de miles de manifestantes en Lisboa y Oporto en una protesta que convocaron cuatro jóvenes de la Universidad de Coimbra en Facebook. Las dos plataformas de la península mantienen contacto. Aun cuando la acción no está unificada, explican Fabio y Javier, existe solidaridad internacional y apoyo mutuo con movimientos similares de Bulgaria, Grecia o Gran Bretaña.

A diferencia del portugués, Democracia Real Ya no es un movimiento juvenil, aunque muchos jóvenes han respondido a su llamado. Son gente normal y corriente, críticos con las vinculaciones entre política y economía, inquietos sobre cómo se está gestionando la crisis y sobre qué hacer para superar la creencia de que no se puede cambiar nada. Son, dicen ellos, “parados, desahuciados, autónomos, trabajadores, profesionales, estudiantes y jubilados” de distintas generaciones y problemáticas vitales y participan a título individual en esta iniciativa, apartidista y asindical (“No porque seamos antipartidos, antipolítica o antisindicatos, sino porque queremos ser neutrales”, puntualiza Fabio). Javier, por ejemplo, tiene 33 años y es licenciado en psicología. Daniela, mexicana afincada en Barcelona, tiene 28 y se está doctorado; Eugeni tiene 53 años y está parado (“Han cerrado cuatro empresas conmigo dentro”, asegura).

La mayoría se han conocido en el ciberespacio y han ido a parar al movimiento por distintos caminos. A Javier, lo agregó hará unos dos meses y medio un amigo informático de Jerez que se añadió desde el principio. Daniela se enteró hace menos a través de Twitter. “Vi que había una reunión un domingo en Barcelona, acudí y me inscribí en un grupo de trabajo”, explica. “Lo que me gusta es que lo que decimos es ‘¡implícate!’, ‘¡interesate por la política!’. Eso es lo esencial, que la gente se levante y se empodere de su vida”. Eugeni se unió a la plataforma hace mes y medio a través de Attac Acordem, de la que es miembro. “Supe que existía porque se puede decir que llevaba muchos años esperando que apareciera una cosa así. Salí eufórico de la primera reunión”, recuerda. Muchos, supongo, se enteraron por la página de Facebook, que ya tiene más de 14.000 simpatizantes (el vídeo que promueve su manifiesto ha sido visto más de 9.000 veces).

La convocatoria del 15M se extendió como un virus en la red. Como en BCN, existen grupos en otras muchas ciudades, desde León, Cádiz, Las Palmas y Valencia a Figueres y otros montados por españoles residentes en Dublín o Praga. Los hashtag #democraciarealya, #democraciareal, #tomalacalle o #15M están generado un vivo debate y adhesiones en Twitter. Otros grupos que trabajan con una reivindicación parecida desde las redes sociales se han añadido a la convocatoria, como la plataforma universitaria Juventud Sin Futuro, que se manifestó por primera vez el 7 de abril en Madrid bajo el lema “Sin casa, sin curro, sin pensión, sin miedo” (Su grupo de Facebook tiene ya más de 19.000 miembros y Joventut sense futur, 459), y el Estado del Malestar, un movimiento ciudadano ”indignado y cabreado con el sistema político y financiero” que insta a protestar en todas las ciudades españolas cada viernes a las 19h (en Barcelona organizan performances en la plaza Sant Jaume). Su página de Facebook cuenta con casi 3.000 adhesiones y promueve la discusión en Twitter a través de #malestar.

De hecho, y como subraya Fabio, son movimientos descentralizados y colaborativos y sin una estructura clara (Democracia Real Ya se organiza en asambleas locales y comisiones), que comparten no solo una queja similar sino muchos miembros y simpatizantes. Ese es el caso con No les votes, otra plataforma muy activa en internet que surgió para denunciar la ley Sinde –hasta hoy, su web ha recibido 1.328.857 visitantes únicos- y que insta en Twitter y desde Facebook (10.000 seguidores) a no votar ni al PP ni al PSOE ni a CiU en las próxima elecciones. Muy hábiles usando la tecnología –Enrique Dans, David Bravo o Javier de la Cueva se cuentan entre sus promotores- disponen también de una wiki. Aunque no han dado un apoyo explícito como grupo a la protesta, en youtube cuelga un video conjunto llamando a la movilización.

Y acabo aquí el recuento, aunque vista la ebullición y el descontento social, seguro que me dejo alguno. Una última iniciativa que me parece interesante destacar es el proyecto Comunicaos que ha puesta en marcha la plataforma audiovisual ciudadana en soporte web Vúdeo y que propone a los usuarios usar la webcam para mandar videopost con mensajes de 30 segundos en que expliquen las razones para salir a la calle el 15 de mayo. “Porque es una oportunidad perfecta para que nos unamos dejando atrás todo tipo de prejuicios y de diferencias”, argumenta David en uno de los videos. “Porque necesitamos una revolución ética que nos haga valorar lo verdaderamente importante de esta vida”, añade Mario. “¡Porque la calle es nuestra!”, acaban exclamando ambos a coro.

¿Qué esperan para el día 15? Se lo pregunté ayer a Javier. “Soy optimista. Más de 32.000 personas han dicho que van a ir en Facebook y más de 3.000 en Barcelona” (y 2.601 en Madrid, 1.580 en Sevilla, 1.073 en Murcia o 1.803 en Valencia). Se lo he preguntado también esta mañana por teléfono a Fabio. “Espero que sea un punto de inflexión, que España salga del grupo de los adocenados y acríticos y pueda iniciar un cambio de mentalidad. Espero que pueda unir a gente muy diferente”. La cita en Barcelona es a las 6 de la tarde en Plaza Catalunya.